¡Que el sindicato gráfico se pronuncie contra el ajuste! Plenario de delegados para votar un plan de lucha por el salario

La inflación del 2011 superó el 25 por ciento. A eso hay que sumar el impacto que tendrá en toda la cadena de precios los tarifazos que comenzaron a aplicarse desde fines de año. El acuerdo entre el gobierno y Macri para traspasar el subte implicó un aumento del 125 por ciento; los incrementos en las facturas de luz y gas alcanzarán gradualmente a toda la población; la suba del boleto de colectivo es solo cuestión de oportunidad; y también están los impuestazos aplicados por cada municipio. Todos estos incrementos acumulados se traducen en un deterioro salarial del 35 o 40 por ciento. Es evidente que el 18 por ciento que reclaman los industriales como tope para las paritarias con el verso de “evitar una escalada inflacionaria” solo apunta a mejorar sus costos embolsándose la diferencia que sale de nuestros salarios. ¿Y la CGT? Moyano dice que no aceptará “techos" a la paritaria de camioneros pero esa negociación tendrá lugar a mediados de año. De este modo le deja el camino libre al gobierno y a la UIA para avanzar en arreglos fraccionados. La ofensiva “ajustadora” del gobierno ha dividido a los sindicatos entre los más oficialistas y los “críticos” como el propio Moyano y más aún Barrionuevo - que aprovecha para reclamar el desplazamiento del camionero -; pero ninguno hasta ahora hizo nada más allá de las chicanas verbales. Incluso la solicitada que el domingo 22 publica la Federación de Camioneros condena la represión en Santa Cruz y Chubut, el pase a disponibilidad de 20 mil estatales y hasta la precarización laboral pero no se propone ninguna acción del sindicato ni mucho menos de la CGT. Cuando el Estado y las patronales se empeñan abiertamente en trasladar a los trabajadores la factura de la crisis la respuesta obligada que debemos dar es de conjunto, como clase obrera. Un programa elemental de defensa de las paritarias debe incluir 1) el reconocimiento inmediato de la inflación acumulada de 2011 y de los tarifazos en curso 2) ajuste automático de los salarios de acuerdo con la inflación; 3) ninguna suspensión ni despido. Pase a planta de los contratados; 4) no a los tarifazos e impuestazos. Que se abran los libros de las privatizadas; 5) abajo las cláusulas flexibilizadoras. Incorporación al básico de todos los adicionales condicionados a la productividad. La Federación Gráfica Bonaerense “con el ajuste K” La Federación Gráfica de Ongaro fiel a su estilo simplemente finge ignorar la realidad. No se pronuncia sobre la crisis de la CGT, ni sobre el aumento de las tarifas, ni sobre nada que tenga hoy alguna importancia. La editorial de su última revista de enero está dedicada a festejar los logros del kirchnerismo contrastándolo con la “época de las nefastas políticas neoliberales” justó en el momento que el gobierno “sin la tutela del FMI toma medidas parecidas” (¡textual de la solicitada de Camioneros!). Ongaro se quiere colgar del triunfo “del 55 por ciento” justo cuando el sistema de subsidios a los privatizadores y banqueros se desmorona y Argentina se incorpora al escenario mundial de crisis políticas y movilizaciones populares como lo adelanta Santa Cruz. Ese mismo editorial se refiere a la crisis del 2002 ocultando que el sindicato gráfico estuvo completamente ausente de toda lucha de aquella época e incluso fue aliado del gobierno de la Alianza (recordemos el abrazo de Ongaro con la por entonces ministra de trabajo Patricia Bullrich). Su gastado recurso de hablar del pasado – tergiversándolo – le sirve para esquivar el presente. El problema es: ¿qué hace hoy el sindicato gráfico ante el tarifazo descomunal que se puso en marcha? ¿Qué dice de la crisis de la CGT? ¿Qué medidas encara para exigir al gobierno el pago de la deuda con la obra social quebrada? ¿Qué dice de la miseria de la jubilación y del trabajo en negro que en nuestro gremio es moneda corriente? Que se reabra la paritaria Esperar hasta abril para empezar la negociación salarial en medio de esta carestía galopante sería una concesión enorme a las patronales gráficas. La cláusula siete del último acuerdo contempla que en caso de producirse un desfasaje inflacionario se reabriría la discusión, por lo tanto es necesario reclamar la convocatoria inmediata a la paritaria para exigir un aumento de emergencia que compense el tarifazo. Tal vez una razón adicional por la cual la directiva no toma nota del derrumbe del salario gráfico es que sus sueldos distan mucho del promedio de ingresos de sus representados: mientras la categoría 7 ronda los 4.000 pesos de bolsillo en noviembre los secretarios superaron los 10 mil; y ni hablar de los 13 mil de Ongaro comparados con los 1.400 pesos que perciben el 76 por ciento de los jubilados o los 19 mil del abogado sindical. Esto es lo que está registrado, claro. ¡Queremos sueldos como los de la directiva! ¡Basta de trabajo en negro, precario o tercerizado! ¡Basta de impuestos al salario! ¡Ningún tarifazo ni impuestazo! Paritarias libres y sin techos. 40 por ciento de aumento e indexación automática según la inflación. Defensa de todas las conquistas salariales y del 82% móvil. Que se convoque ya al plenario de delegados para discutir este programa y un plan de lucha. LISTA NARANJA GRÁFICA.