miércoles, 30 de enero de 2019

Declaración de la Lista Naranja Gráfica

El diario La Nación cierra su planta impresora y los trabajadores salen a la lucha



En el marco de un ajuste brutal dictado por el FMI y cumplido a rajatablas por todas las fuerzas políticas patronales -desde Macri y Vidal hasta Alicia K- el diario La Nación cerró su planta impresora dejando a un centenar de trabajadores en la calle. Los compañeros están en pie de lucha en defensa de sus puestos de trabajo. El cierre no es un hecho aislado. Los despidos en el gremio se cuentan por miles y los cierres de talleres son innumerables. La precarización laboral es moneda corriente. 


En estos momentos, Interpack se encuentra en lucha acampando tras un mes de ocupación en defensa de los puestos de trabajo y contra la flexibilización. La respuesta de la base obrera está presente en cada conflicto pero el aislamiento que propone la directiva del sindicato como orientación diluye el potencial de nuestras fuerzas ¡Hay que unificar las luchas!

Se impone una respuesta del conjunto del gremio gráfico para frenar la ofensiva patronal. Esta masacre social no puede enfrentarse luchando de manera aislada. La lucha es ahora. Esperar a las elecciones es funcional a los intereses patronales.

Por una salida obrera 

La patronal de La Nación argumenta baja rentabilidad y terceriza la impresión del diario a Clarín. Una actitud común a todas las patronales: priorizar la rentabilidad a costa de las condiciones y los puestos de trabajo. Ninguna alianza con ningún patrón puede ser una estrategia válida para los trabajadores. Por eso criticamos duramente, entre otras cosas, las movilizaciones convocadas por la directiva del sindicato junto a empresarios Pymes (90% de nuestro gremio). Como así también su convergencia en términos políticos con un sector de las patronales.

La relación de fuerzas es un factor de primer orden en todo conflicto. No hay expectativas en las negociaciones ministeriales vía cabildeos diplomáticos. La patronal de los Saguier tiene todos los días el diario en la calle y la planta de Zepita está militarizada para evitar la ocupación. Se necesita una respuesta contundente del gremio para revertir este cuadro. 

Hace dos años, AGR-Clarín actuaba de manera similar. Pero los trabajadores con la comisión interna a la cabeza se venían preparando para un eventual conflicto de envergadura. Llegado el momento del cierre ocuparon la planta inmediatamente. Clarín en esa oportunidad tuvo que mover todo su peso político para derrotar el conflicto. Sin embargo el costo fue muy alto para la patronal. 

Desde la Lista Naranja Gráfica saludamos la decisión de los compañeros del diario de Magnetto que rechazaron carnerear. Sin embargo, La Nación está en la calle todos los días. Es un tema a resolver de manera urgente y prioritaria.  

Los gráficos necesitamos urgentemente un plenario de delegados para discutir un plan de lucha de todo el gremio para frenar una ofensiva patronal que no tiene intención de detenerse por sí sola. La demora a su convocatoria solo es beneficiosa para las patronales. Proponemos que el plenario sesione en las puertas de Interpack en lucha o eventualmente en las puertas del diario, con mandato de fábrica. Pongamos en pie el gremio. Hay que unificar los conflictos en un plan de lucha general que incluya el paro de gremio. Cualquier otra variante es boicotearar las luchas.


Por Lista Naranja Gráfica

viernes, 25 de enero de 2019

Interpack: acto y bloqueo en planta 2




En un conflicto que ya lleva más de 50 días, los trabajadores de Interpack –en lucha contra el despido de once compañeros en la planta- siguen dando muestras de enorme tenacidad.

Al acampe en la puerta de la fábrica de Lomas de Mirador (Matanza), que se mantiene con gran presencia y con cronograma de actividades políticas y culturales, este jueves se le sumó un acto en la puerta de la planta 2 de la empresa, ubicada en el barrio matancero de Los Pinos.

Desde temprano, centenares de trabajadores y estudiantes acompañaron a la Comisión Interna en una agitación política dirigida a los trabajadores de planta 2, que sufren en carne propia la intransigencia patronal -al recibir trabajo extra derivado de planta 1. La Comisión Interna de allí, ligada a la Lista Verde que conduce la Federación Gráfica Bonaerense, jamás se solidarizó con el conflicto y hasta rechazó entrevistarse con los delegados en lucha.

La masividad del acto fue tal que obligó a la empresa a rearmar operativos logísticos de sus camiones. La repercusión de esta actividad se vio luego reflejada en una nueva audiencia en la cartera de Trabajo, donde a pesar de que la patronal ratificó los once despidos, el gobierno extendió la conciliación obligatoria -apoyándose en un resquicio legal: que la planta no operó durante la primera semana- e instó a las partes a hallar una solución.

El gobierno teme que el reguero de conflictos fabriles se siga extendiendo y que no pueda darle un curso favorable a las exigencias patronales.

Por el lado de los trabajadores y el clasismo apostamos a lo contrario: la acción unificada de todos los conflictos es el camino para derrotar el ajuste de Macri y los gobernadores. A la pasividad de la CGT y las CTA, le oponemos la acción del sindicalismo combativo.

Por eso es que desde el Plenario del Sindicalismo Combativo hemos convocado una reunión, el próximo lunes, para organizar nuevas medidas de lucha en solidaridad con los conflictos, y una gran movilización por todos los reclamos.

Por Francisco Travía

jueves, 17 de enero de 2019

Interpack: Choques y tensiones en medio de la “conciliación”



Finalizada la toma, el conflicto ha ingresado una nueva etapa


Con el levantamiento de la toma y la entrega de la planta a la patronal, el conflicto ingresó a una nueva etapa, pero está lejos de resolverse. La empresa no ha hecho hasta ahora ninguna propuesta de reincorporaciones y se limitó a insistir con un ofrecimiento económico. Esto fue rechazado por la comisión interna en la única -y breve- reunión que tuvo lugar.


Los intentos de la Oficina de Personal por abrir una negociación con algunos de los despedidos, por fuera de la comisión interna, no prosperaron. Todos ellos se mantienen en los marcos del conflicto, participando del acampe y las actividades.

Tampoco tuvo éxito la pretensión de poner en marcha la planta transfiriendo las tareas de los compañeros “licenciados” a otros, e incluso apelando a un esquema de rotaciones; sectores enteros no funcionaron y la producción no pudo normalizarse.

En la primera audiencia en la Secretaría de Trabajo sólo hubo denuncias cruzadas por la violación de la conciliación: la empresa aduce que hay una negativa de los trabajadores a prestar tareas y la Interna que la empresa pretende ampliar las funciones, pasando por sobre el convenio colectivo.

La planta 2 debe apoyar nuestra lucha

Una parte de la producción es desviada a Interpack 2 (que incluso trabaja horas extras). El cuerpo de delegados verde, que dirige esa planta, es perfectamente consciente del fuerte malestar que recorre una parte de su base, por el rol carnero que le obligan a jugar. Más aún, al ser ellos mismos víctimas del plan general de reestructuración: continúan los despidos, los retiros “voluntarios” y las nuevas modalidades de trabajo “flexibles”.

Nuestra agitación sobre las empresas del grupo denunciando esta situación, debe dar lugar, en caso de que la patronal mantenga su posición, a acciones concretas de repudio y el sindicato gráfico tiene la responsabilidad de garantizar que no se repitan más actos de carnereaje contra nuestro conflicto.

El sindicato

La directiva ha seguido una línea correcta en el plano administrativo: se sometió a las resoluciones de la asamblea de la fábrica, no intentó despegarse de la determinación de ocupar la planta y rechazó formalmente la primera conciliación (que lisa y llanamente ratifica los despidos).

Sin embargo, no tomó ninguna medida gremial de apoyo al conflicto. Lo que aduce es que la base está muy golpeada y que carece de musculatura para cualquier acto de respaldo. Una verdad “relativa” que constituye una auto-incriminación: en todo caso, es el resultado de la política de postración del kirchnerismo ante la ofensiva patronal. Casi cinco mil despidos en tres años no justificaron ninguna lucha de conjunto.

No obstante, una orientación decidida, que surja de la deliberación amplia de la base, puede rescatar al gremio del estado de desmoralización y despertar sus enormes tradiciones combativas.

El acampe

Una mención final corresponde al acampe, que crece en participación. Las actividades políticas y culturales que se realizan, prácticamente a diario, son un factor de formación importante, en tanto ponen en contacto a jóvenes y militantes con una de las más importantes experiencias de organización clasista del movimiento obrero.

Por sobre las reivindicaciones puntuales del conflicto, lo estratégico son las lecciones de esta construcción, ligada estrechamente a la Naranja Gráfica y al Partido Obrero.

Por Miguel Bravetti

sábado, 12 de enero de 2019


Siguen las actividades en el acampe de Interpack


Domingo 13 de enero, a las 18, zapada rockera con Pecho y Cabra (Las Manos de Filippi), Gaviota y el Ruso (Mal Pasar), Le Perdant y otros.


Temple 2780, Lomas del Mirador: allí se encuentra el corazón de nuestra actividad partidaria desde hace mes y medio.

Desde el comienzo del conflicto, la agenda del Partido Obrero en el Frente de Izquierda está centrada en el acompañamiento del acampe de los trabajadores de Interpack. El acampe representa el lazo solidaridad y organización entre la asamblea interna de la fábrica y los nucleamientos obrero, estudiantiles y del movimiento de desocupados del municipio, incluso del país. Es el centro de organización que hizo posible el fondo de huelga, la organización de las comidas – famosas por su elaboración –, la difusión del conflicto y, más importante aún, fue el canal de expresión para muchos de los trabajadores de la fábrica. La naturalidad y comunión que la organización del acampe y la asamblea de trabajadores son destacables; nadie pide ya permiso, todos nos reclamamos orden y limpieza en las carpas, cuidado con quien se tome todo el jugo o rechace un “quiero retruco”.

Las iniciativas desbordaron, comenzando por festivales locales con la presencia de artistas de la zona, el festejo multitudinario de la Navidad con las familias de los trabajadores, proyección de películas, tarde de juegos y payasadas con los más pequeños, y finalmente un festival de aún mayor magnitud que contó la actuación de dos bandas integradas por trabajadores en lucha de Interpack. Tal vez, la expresión más acabada de todo esto estuvo en boca de uno de los compañeros de la fá1brica, que segundos antes de tocar su última canción expresó en grito de bronca: “hace muchos años que trabajo en este lugar (señalando a planta, a su derecha), ¡nunca imaginé tocar en sus puertas, Zupan g@%#+!”.



La actividad del Partido Obrero, sus plenarios, reuniones, charlas y cursos pasan en gran medida por el acampe de Interpack. En este momento estamos desarrollando allí un curso de formación política sobre “La concepción Marxista del Estado y La Revolución” en tres encuentros, el último  de los cuales tendrá lugar el 14 de enero y estará a cargo, ni más ni menos, que del secretario general de la comisión interna del taller, Miguel Bravetti. Además, este domingo 13, a las 18 hs, llevaremos adelante una zapada abierta con la participación especial del Pecho y Cabra, de Las Manos de Fillipi, y Gaviota y El Ruso, de Mal Pasar.

El apoyo de los vecinos, desde el primer día es excepcional, donaciones de dinero, alimentos, abrigo, bocinazos y gritos de aliento cada hora. Es un ejemplo de solidaridad y organización obrera para todo el país; lugar donde se despida, debemos tener una asamblea que luche y una comunidad que preste su espalda.

Viva la lucha de Interpack y de los trabajadores de todo el país. Paro de 36 horas, no aceptamos ningún despido, abajo el ajuste de Macri y la falsa oposición. Abajo el tarifazo. Compañeros adelante.

viernes, 11 de enero de 2019

“Para derrotar al tarifazo y al ajuste necesitamos un paro de 36 horas”


La izquierda participó de la “marcha de antorchas” de la CTA y Camioneros con su propio planteo.


“Para derrotar al tarifazo y al ajuste necesitamos un paro de 36 horas”

El Plenario del Sindicalismo Combativo participó con una columna independiente de la marcha contra el tarifazo convocada por las conducciones de Camioneros y las CTA. 

Antes de sumarse a la movilización, la izquierda realizó su propio acto, bajo el lema “ni tarifazos ni despidos”, donde reclamó un inmediato paro activo nacional de 36 horas y un plan de lucha de las centrales sindicales. 
Participaron de la convocatoria los trabajadores en lucha contra despidos de Interpack, Siam y Pilkington, las gremiales AGD (de docentes de la UBA), Unión Ferroviaria Oeste y Sutna (neumático); las federaciones estudiantiles de la Universidad de Buenos Aires (junto con los centros de Veterinaria y Filosofía y Letras, entre otros) y de la Universidad Nacional de las Artes; agrupaciones de estatales y municipales, el Polo Obrero, las organizaciones del Frente de Izquierda (Partido Obrero, Izquierda Socialista, PTS) y el MST, entre otras organizaciones políticas. 


El dirigente del PO Néstor Pitrola destacó que esta es la orientación necesaria “para derrotar el conjunto de la política que ha llevado al tarifazo, al ajuste, a los despidos”; señaló que la marcha de antorchas, convocada como una medida aislada y sin continuidad por el moyanismo y el kirchnerismo, “es un encubrimiento de que los grandes sindicatos y centrales obreras en la Argentina están acompañando con una paz social el ajuste de Macri, el plan del FMI y la descarga de la crisis sobre los trabajadores”, y enmarcó la participación del sindicalismo combativo en la marcha “en una perspectiva integral de los trabajadores y la izquierda, por la nacionalización integral del petróleo bajo control de los trabajadores y el corte de las concesiones a las privatizadas”.


Ileana Celotto, secretaria general de AGD-UBA, denunció el llamado de Hugo Yasky “a no hacer paros en un año electoral” y sostuvo que “nosotros adoptamos el método de Interpack: la huelga y la ocupación. Tenemos que luchar contra los tarifazos y los despidos y por nuestro salario”.

Por su parte, el flamante integrante de la comisión directiva del gremio del subte (AGTSyP) por la minoría, Christian Paletti, marcó que la participación del sindicalismo combativo con una columna independiente muestra a los trabajadores “que acá hay un canal para enfrentar la política del gobierno”.

En el cierre del acto, el secretario general del Sutna Alejandro Crespo señaló que los trabajadores “no tenemos vacaciones, estamos todos sin salir de Buenos Aires por la crisis económica” y apuntó que “no hay tiempo para esperar” en un escenario de golpes al salario, de abierto favor de la Secretaría de Trabajo a las empresas que despiden y cuando el gobierno procura avanzar con una reforma laboral. “Los compañeros no pueden esperar las elecciones despedidos, en sus casas: tenemos que imponer la presión del movimiento obrero”, concluyó Crespo, llamando a una gran acción del sindicalismo combativo en ese sentido.

lunes, 7 de enero de 2019

El significado del conflicto de Interpack


Se levantó la ocupación, sigue la lucha.


El levantamiento de la ocupación de la planta de producción y de las oficinas de administración, votado por la asamblea de los trabajadores, abre una nueva etapa en el conflicto.

En los 32 días transcurridos se desplegó un amplio arsenal de medidas de lucha además del paro, la toma y el acampe en la puerta de la fábrica, como movilizaciones, cortes, festivales y actos, que desafiaron la amenaza de un desalojo judicial y las posibles represalias, anunciadas por la secretaría de Trabajo, por desacatar la “conciliación obligatoria”, la cual, en su versión original, simplemente ratificaba los despidos.

Una “conciliación” a la medida de la patronal

El dictamen rechazado implica un salto en el accionar pro-patronal de la secretaría de Trabajo. Su aceptación hubiera significado un golpe al conflicto y un antecedente nefasto.

El voto unánime a favor de desacatarlo, la impugnación formal a la actuación de la Dirección de Relaciones Laborales y la enorme movilización el jueves 3, forzaron un pequeño pero significativo giro y un “nuevo fallo” – en realidad, una ampliación al texto original – que “insta fuertemente a la patronal” a reincorporar a los trabajadores. La empresa, por su parte, adelantó que cumplirá la resolución, pero licenciará a los once compañeros.

Pese a la “trampa” que supone el licenciamiento (rechazada en el acta por la comisión interna) la asamblea sopesó con cuidado la situación y resolvió aceptar la conciliación, en base a tres consideraciones: 1) aleja la posibilidad del desalojo violento de la planta y el avance de las causas penales; 2) permite el cobro de los salarios y aguinaldos adeudados, que la patronal no abonó con la excusa del bloqueo de la administración; y 3) abre una “ventana” de negociación de quince días.

Esa negociación, previamente pautada, incluye el reclamo de las reincorporaciones, el retiro de la denuncia y un arreglo económico por días caídos e indemnizaciones mayores a quienes opten por la desvinculación.

Chamullo ´nac&pop´

El kirchnerismo tuvo en el conflicto un papel secundario pero muy ilustrativo de su conducta general. La intervención del municipio, que tiene una responsabilidad doble por su pretensión de representar una política alternativa al macrismo y ser cabeza del poder político matancero, se limitó a participar de un par de reuniones sin consecuencias. Un fiasco completo.

Más allá de la “buena predisposición” declarada por los funcionarios –incluso la intendenta Verónica Magario hizo conocer su “preocupación” por el conflicto– se puso de relieve la completa impotencia de los nac&pop frente a los grupos empresarios poderosos. Su supuesta simpatía por los trabajadores no alcanzó siquiera para aportar algunos micros para las movilizaciones. Una conducta similar mantuvo con respecto a la lucha de Siam el intendente de Avellaneda, el ´ultracristinista´ Ferraresi.

Por su parte, el sindicato gráfico, enrolado en la Corriente Federal (también kirchnerista) “acompañó” las resoluciones de los trabajadores, sin aportar un gramo de respaldo gremial: no fue posible concretar ni siquiera una reunión con las comisiones internas del Grupo. Sin minimizar la importancia de la “cobertura institucional” frente a la secretaría de Trabajo y frente a la Justicia, el debate de fondo es la estrategia de una dirección sindical que se autoproclamó abanderada de la resistencia a la ofensiva oficialista.

La mejor medición de esa postración son los aproximadamente cinco mil despidos y la cantidad (indefinida) de cierres de talleres que se produjeron en los últimos tres años sin respuesta por parte del sindicato. Lo que prevalece hoy en la base gráfica es una fuerte desmoralización.

La ocupación, una forma avanzada de lucha

Ésta es la segunda vez que se toma la planta de Lomas Del Mirador. La primera ocupación, que se extendió por ocho días en 2007, fue por un reclamo salarial y por la efectivización del personal contratado.

Las dos ocupaciones de Interpack fueron más duras que otras “huelgas con permanencia” de esta etapa ya que, por un lado, el control total de las instalaciones quedó en manos de los obreros, sin permitir el ingreso de ningún personal, y por otro, no lidiaron con una patronal “en fuga” si no con una que nunca ocultó su intención de continuar operando y apeló a todos los medios económicos y coercitivos para recuperar la planta. Solo la fuerte organización de base – disminuida en número, pero fogueada en innumerables luchas – permite explicar estos 32 días de toma firme.

Conclusiones preliminares

En lo inmediato se abre una etapa de negociación en la que la empresa buscará esterilizar el esfuerzo realizado por los trabajadores y retomar, de algún modo, la iniciativa. Del lado de los trabajadores, deberemos tensar la guardia, continuar con el acampe y la movilización e incluso retomar las medidas adentro, para arribar a un resultado favorable. El desenlace está abierto.

Pero más allá de las consecuencias que el conflicto tenga al interior de Interpack, su significado trasciende el mero reclamo: confirma la eficacia de la ocupación como una forma avanzada de lucha; demuestra las reservas que anidan en la base del movimiento obrero para enfrentar la ofensiva del macrismo (por contraste, la complicidad de todas las direcciones sindicales que apuestan al recambio electoral); y por último, resalta el enorme valor de la construcción clasista bajo la orientación de la izquierda.

Por Miguel Bravetti
Secretario General de la Comisión Interna de Interpack


sábado, 5 de enero de 2019

Interpack: Se levantó la ocupación, sigue la lucha

Interpack: Se levantó la ocupación, sigue la lucha
Luego de 32 días, la asamblea resolvió acatar la conciliación obligatoria, dictada por la secretaría de Trabajo, y levantar la ocupación de la planta de producción y las oficinas de administración.
El conflicto ingresa de este modo en una nueva etapa.
Como resultado de todo lo hecho durante este mes de lucha: la huelga y la toma, movilizaciones, festivales, un acampe en los portones de la fábrica y, la multitudinaria marcha del jueves 3 de enero que permitió revertir la bochornosa resolución de la semana pasada (que lisa y llanamente ratificaba los despidos) se logró la reincorporación transitoria de los once compañeros, aunque sin tareas.
Esto fue rechazado en el acta y será denunciado ante las autoridades como un incumplimiento patronal de la conciliación. No obstante ello, se ha abierto una negociación en torno a tres aspectos: a) el reclamo de reincorporación, b) el retiro de todas las causas penales y civiles, c) el pago de los días caídos y otras cuestiones salariales. La empresa deberá hacer efectivo el pago de los aguinaldos de inmediato.
La asamblea votó también retomar las medidas dentro de la planta en caso de que la negociación no avance; mantener el acampe en la puerta y todas las medidas anunciadas.
También se resolvió participar de la movilización convocada por la CTA y el moyanismo el 10 de enero, en la columna del plenario del Sindicalismo Combativo, con la consigna “Ni Tarifazos ni Despidos. Paro activo nacional de 36 horas, para derrotarlos”.

viernes, 4 de enero de 2019

Tarde de juegos en Interpack


Se está conformando la comisión de familiares para acompañar esta gran lucha.


Con la presencia de varias familias gráficas y de amigos de Interpack, y con la colaboración del juventud del Partido Obrero y del Plenario de Trabajadoras, se realizó el viernes 5 la tarde de juegos para los niños de Interpack, organizada por la Comisión de Familiares de Interpack y la Comisión Interna de la planta.

Más de 30 niños, que fueron llegando junto a sus familias participaron de los distintos juegos organizados por la Comisión de Familiares. El Circo Descartable realizó una función especial para los chicos de Interpack, ayudaron a ordenar los juegos  y las actividades la payacolaboradora Tutuca Suspenso y amigas animadoras.

La comisión de familiares que se está conformando al calor de la lucha por la reincorporación de los despedidos de la Planta 1, es un gran paso organizativo que refuerza enormemente la lucha de los compañeros en un frente único de la familia obrera contra la patronal y el estado. Se trata de un salto en calidad que tenemos que ayudar a desenvolver.

jueves, 3 de enero de 2019

Interpack: después de la conciliación trucha, otra masiva movilización a la Secretaría de Trabajo


La comisión interna reclamó a las centrales obreras un paro activo de 36 horas.



Los gráficos de Interpack 1, que llevan 31 días de huelga y ocupación contra el despido de once compañeros, se movilizaron hoy junto a organizaciones solidarias con su lucha desde Congreso a la sede de Callao de la Secretaría de Trabajo -donde tuvo lugar una nueva audiencia con la patronal- para reclamar que se abra una verdadera instancia de negociación para la satisfacción de su reclamo.


La cartera había dictado el jueves pasado una “conciliación obligatoria” de carácter ilegal y sin precedentes, ya que ratifica los despidos en lugar de retrotraerlos y amenaza a los trabajadores con todo tipo de sanciones si no deponen las medidas de lucha –cancelando en los hechos cualquier instancia de mediación y resolución del conflicto. Los obreros rechazaron la medida en una asamblea la semana pasada.

Tras una nueva semana de acampe y la presentación de un recurso de “reconsideración” por parte de la gremial, la Federación Gráfica Bonaerense, en la audiencia de hoy la Secretaría de Trabajo dispuso una “aclaración” instando a la empresa a reincorporar a los trabajadores. La patronal firmó el acta, pero adelantado que eximiría a estos de tomar tareas durante el tiempo que dure la conciliación.

Al salir de la reunión, el secretario general de la comisión interna Miguel Bravetti señaló ante la masiva movilización –con la presencia solidaria de la interna de ATE Inti, AGD-UBA, Fuba, Partido Obrero, Polo Obrero,  Izquierda Socialista, MST, RyR, entre otras- que “hay que ser claros: esto solo nos coloca ante una nueva instancia. Nosotros fijamos en el acta nuevamente nuestra posición: queremos a los compañeros adentro y con tareas. Pero dijimos que vamos a llevar esta nueva propuesta a consideración de la asamblea general que vamos a hacer mañana” a las 13:30h. Y marcó que “estamos tan firmes con el primer día en exigir la reincorporación definitiva de los once compañeros”

Bravetti se refirió a la conferencia de prensa realizada por la mañana por las CTA Autónoma y de los Trabajadores junto a la Federación de Camioneros, en la que anunciaron demandas judiciales y algunas “marchas de antorchas” contra los tarifazos (el 10 en Ciudad de Buenos Aires, 17 en Rosario, 24 en Mar del Plata y 31 en Mendoza). Con la autoridad de una organización obrera que viene llevando adelante todo tipo de iniciativas de lucha, la interna de Interpack planteó que “vamos a participar, porque está bien marchar, ganar las calles, denunciar, pero desde acá les decimos a Pablo Moyano, a Pablo Micheli y a Hugo Yasky que lo que necesitamos los trabajadores es un paro activo de 36 horas, como parte de un plan de lucha sostenido para quebrar la política de ajuste contra los trabajadores”.